Cuidado dental para bebés

Cuidado dental para bebés

Información sobre el cuidado dental para tu bebé

¡Felicitaciones por la llegada de tu bebé! ¿Ya estás preparado para la llegada de su primer diente?

Aquí encontrarás algunos consejos para que tu hijo o hija tengan una vida de sonrisas saludables.

Cuidado de las encías

Incluso antes de que aparezca el primer diente de tu bebé, las encías pueden beneficiarse de una cuidadosa atención.

Después de amamantar o dar el biberón, envuelve un dedo con una toallita o gasa limpia y húmeda, frótala suavemente sobre el tejido de las encías de tu bebé.

Esta práctica limpia la boca de tu pequeño de cualquier fragmento de comida y comienza el proceso para desarrollar buenos hábitos diarios de cuidado bucal.

El primer diente del bebé

Cuando el primer diente hace su entrada, es hora de actualizar a un cepillo de dientes para bebés.

Por lo general, hay dos opciones: un cepillo de dientes de mango largo que tú y tu bebé puedan sostener al mismo tiempo o un cepillo con forma de títere que se coloca sobre la punta de su dedo índice. En cada uno de estos, las cerdas son suaves y pocas.

En esta etapa, la pasta de dientes no es necesaria; simplemente sumerge el cepillo en agua antes de cepillarse.

Si tu pequeño no reacciona bien a la introducción de un cepillo de dientes, no te rindas. Vuelve a usar una toallita húmeda durante unos meses y vuelve a probar el cepillo de dientes.

Durante el proceso de la salida de dientes, tu hijo querrá masticar casi cualquier cosa y un cepillo de dientes para bebés con un mordedor puede convertirse en su juguete favorito durante este período.

Cepillado con pasta de dientes

Cuando aparezcan algunos dientes más puedes comenzar a usar pasta de dientes con el cepillo de tu hijo.

En esta etapa, usa solo una pequeña cantidad de pasta dental con flúor (del tamaño de un grano de arroz).

Desde el principio, haz que tu pequeño practique escupir la pasta de dientes después del cepillado, pues no debe tragarse a ninguna edad.

Evitando las Caries

La parte más importante para evitar caries o problemas de salud bucal se pueden solucionar con: No le des a tu bebé ningún tipo de líquido endulzado, como jugos, aguas frescas o gaseosas.

Incluso los azúcares presentes en el jugo de frutas naturales, la fórmula y la leche (esto también se aplica a la leche materna) pueden causar caries, por lo que la limpieza regular de los dientes y las encías es vital.

Además, asegúrate de que tu bebé nunca se acueste con un biberón; los líquidos azucarados en contacto prolongado con los dientes son garantía de las primeras caries de la infancia, también llamadas “caries del biberón”.

Primera visita al dentista

Se recomienda que lleves a tu bebé a una visita con el dentista de niños dentro de los seis meses posteriores a la salida del primer diente, generalmente alrededor de su primer cumpleaños.

Dado que las caries pueden ocurrir incluso en los dientes más pequeños, cuanto antes nos visite tu bebé, es más probable que evite problemas.

Buscaremos cualquier signo de problemas tempranos con la salud oral de tu bebé y te hablaremos sobre la mejor manera de cuidar los dientes de tu pequeño.

Recuerda que es muy importante prepararte para cada visita dental con una actitud positiva, ya que esto contribuye en gran medida a que tu hijo se sienta cómodo con las visitas regulares al dentista.

Dar un buen ejemplo

Como parte del proceso de aprendizaje natural, los pequeños son imitadores expertos y tú puedes aprovechar este talento.

Cepíllate y usa hilo dental a diario mientras tu hijo te está mirando, y él o ella intuirá a temprana edad la importancia de tus buenos hábitos.

Tan pronto como tu hijo muestre interés, dale su propio cepillo de dientes y anímalo a “cepillarse” contigo. Encontrará cepillos de dientes con mangos gruesos y cortos que son fáciles de agarrar o especiales para bebés.

La mayoría de los niños no tienen la destreza necesaria para limpiarse bien los dientes hasta que tienen seis o siete años, así que tendrás que hacerlo tú; parte del trabajo de ser padre de familia.

Prueba diferentes técnicas para que el cepillado sea divertido: pasta de dientes con sabor, un cepillo de dientes con un personaje favorito o cantar canciones sobre el cepillado.

¡El objetivo principal de esto es crear hábitos de salud bucal a una edad temprana para preparar a tu hijo para una vida de dientes sanos y sin caries!

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